DESARROLLO DEL SISTEMA NERVIOSO EN EL EMBRIÓN





Tras la unión del espermatozoide con el óvulo, se forma una masa celular denominada cigoto; el cigoto es un disco formado por dos capas de células: El epiblasto y el hipoblasto.

Al comienzo de la 3ª semana embrionaria, comienza una nueva fase denominada gastrulación; en esta fase se formarán las capas embrionarias de las que se desarrollarán todos los órganos corporales y el Sistema Nervioso. Estas capas son: 
- Endodermo (capa más interna): De la que se formará el sistema respiratorio, el sistema digestivo y las glándulas.
- Mesodermo (capa intermedia): De la que se formará el sistema cardiovascular, el sistema músculo-esquelético, el sistema urinario, el sistema reproductor y la dermis de la piel.
- Ectodermo (capa más externa): De la que se formará la epidermis de la piel y el sistema nervioso.

En el mesodermo se forma además una prolongación precursora de la columna vertebral llamada Notocorda,  la cual envía unas señales inductoras al ectodermo, estas señales hacen que una parte del ectodermo se desarrolle como sistema nervioso. La parte del ectodermo que no se ve influenciada por las señales inductoras se desarrollará como epidermis de la piel.

                                           


A partir del día 18 embrionario, en el ectodermo se forma la  placa neural; esta placa se va plegando sobre sí misma y aparece en la línea media un surco neural flanqueado por dos pliegues; en pocos días estos pliegues se fusionan y van cerrando el surco formando un Tubo Neural hueco.
Hacia el día 23 embrionario gran parte del tubo neural se ha fusionado. Solo quedan abiertos los extremos que se denominan neuroporo rostral y neuroporo caudal. Al final de la 4ª semana embrionaria desaparecen ya que el tubo neural se ha fusionado por completo.
Esta fase de cierre de los neuroporos es muy importante, puesto que si hubiera alguna anomalia en el cierre se originarian malformaciones graves en el sistema nervioso. Si el fallo ocurre en el cierre del neuroporo caudal se producen malformaciones en la médula espinal (espina bífida) y si el fallo ocurre en el cierre del neuroporo rostral se producen malformaciones en el encéfalo y en el cráneo.
Estos fallos en los neuroporos se deben a mutaciones genéticas, un exceso de ingesta de alcohol o de vitamina A por parte de la madre o una insuficiencia de Ácido fólico (por eso a las futuras embarazadas se les receta ácido fólico unos meses antes de la fecundación).

Despues del cierre del tubo neural, la parte externa de cada pliegue neural se separa del tubo y del ectodermo adyacente, se fusionan y forman una estructura denominada cresta neural.

Del tubo neural se formará el Sistema nervioso Central y de la cresta neural se formará el Sistema nervioso Periférico.
                                 

 
La forma en que las células actúan para convertirnos en seres con un sistema nervioso maduro es tremendamente complicado y perfecto. Los factores externos influyen en la perfección de ese sistema. La falta de nutrientes, el tabaco, el alcohol, las drogas, los productos químicos, los psicofármacos, ponen en peligro la perfección del sistema nervioso del futuro ser que crecerá en nuestro interior.